Las hipotecas han representado por años una manera de obtener un bien, un inmueble u otro. Al adquirir un inmueble a crédito o con plazos para pagar sigue perteneciendo a ese vendedor hasta que se concluye el período del pago y es cuando se concreta la compra, es así que se genera una hipoteca ante una compra que no es de contado.

Otra manera de adquirir una hipoteca es colocando un bien como garantía ante una deuda que aunque representa un valor menor al de la propiedad, es quien debe cubrir ese compromiso si quien lo adquiere no paga.

Es de esta manera que las personas que no poseen la libertad económica para realizar compras instantáneas o pagadas al momento pueden adquirir un sinfín de elementos que vienen a complementar sus vidas dentro de una sociedad organizada, que cada día presenta nuevas y mejoradas opciones para sus consumidores.

Una forma de comenzar un proyecto es con la compra de un terreno, pero ¿cómo saber si ese espacio que elegiste o consideraste óptimo para tu desarrollo está hipotecado? Es una de las frecuentes interrogantes que se generan ante la búsqueda de ese lugar que deseas adquirir.

¿Se puede comprar un terreno hipotecado?

La respuesta es sí. Y es que las leyes están elaboradas para apoyar las correctas gestiones, amparando así a ese comprador que se asesora antes de comprar un terreno que ha sido hipotecado, sin dejar de brindarle la oportunidad de liberar este proceso anterior con el pago de la deuda que posea.

Las dificultades ante una venta de este tipo se han dado para la ubicación de un cliente que esté dispuesto a asumir los trámites correspondientes, pero si el terreno que buscas está bajo esta condición, se puede realizar una exhaustiva revisión y una posterior compra bajo una liberación de hipoteca que no genere ningún problema posterior. 

Es recomendable revisar el estatus de cualquier terreno, bien, inmueble o propiedad que se quiera comprar antes de hacer algún apartado o antes de firmar un compromiso, sólo así el comprador tendrá un panorama claro de lo que viene antes de tomar una decisión.

¿A dónde acudir para saber si un terreno está hipotecado?

El gobierno de Perú ha dispuesto un órgano público encargado de todo lo relacionado con las hipotecas. En este espacio puedes consultar el estado de cualquier propiedad. Si eres Notario, Empresa o persona natural, puedes acceder a estos registros  dispuestos para la satisfacción de sus usuarios.

La SUNARP (Superintendencia Nacional de Registros Públicos) es la entidad que cuenta con una plataforma dotada de lo necesario para realizar consultas relativas a: Alerta registral, consulta vehicular, calculadora registral, SID SUNARP, servicio de publicidad registral en línea, consulta de reserva de denominación social o razón social, entre otras. 

El distanciamiento social ha llevado a mejorar y a ampliar las maneras de trabajar de los organismos de gobierno, ello ha contribuido a la actualización de las plataformas digitales y el SUNARP cuenta con atención en línea, en la cual se realizan diversas gestiones sin necesidad de dirigirse a la sede correspondiente para cada región.

La SUNARP es la primera entidad informada de la liberación de cualquier hipoteca, de esta manera garantiza la información dada ante cada consulta. Se actualiza en su sistema tanto la adquisición de una hipoteca como la liberación de ella, es decir que la respuesta al usuario tendrá validez en el momento en que la obtiene.

Pasos a seguir para liberar la hipoteca de un terreno

Las razones que invaden a las propiedades para pasar por un proceso hipotecario son variadas. Lo principal es esa necesidad de realizar compras a crédito, pagando en cuotas o a plazos especiales que se definen entre el vendedor y el  comprador. Es en este momento cuando una venta no se concreta sino hasta el momento de la finalización de estos pagos.

Esos pagos sufren inconstancias gracias a problemas de salud, gastos excesivos inesperados, rupturas maritales, caídas de la economía o procesos inflacionarios inesperados, entre muchos otros. 

Algunas de estas causas se escapan de las manos de quien adquiere una deuda, que es en este caso la primera persona interesada en pagar para no perder su futura propiedad.

Se da con facilidad la necesidad de vender, traspasar la deuda y liberar a esta persona de esa responsabilidad que no ha podido cumplir y es en ese momento donde se puede realizar una venta, a sabiendas del interesado de los trámites adicionales que se deben realizar para lograr su adquisición.

Si la hipoteca está en manos de una entidad bancaria, por ejemplo, se inicia cancelando a través de una minuta firmada en Notaría la deuda al banco y este a su vez emite en los próximos días una constancia que se introduce en el SUNARP solicitando la liberación de todos los gravámenes. Luego de emitida esa conformidad se procede a la compra oficial del inmueble.